martes, 7 de enero de 2014

SAN VICENTE MARTIR 22 DE ENERO.


San Vicente Martir es el patrón de la ciudad de Valencia y es por ello que el 22 de enero se dedica a honrarlo. Hay que recorrer la historia para saber por qué resulta tan especial este personaje para la historia local. Vicente era un joven diácono que viviò a comienzos del siglo IV de nuestra era. 
Eran tiempos de cruda persecución, Diocleciano se empeñaba en detener el avance del cristianismo y perseguìa y encarcelaba a los miembros de la iglesia torturándolos hasta que se convertían o morían en los calabozos. Valero y Vicente fueron trasladados por Daciano, representante de Diocleciano en España, y fueron encarcelados en Valencia y sometidos a múltiples sesiones de torturas.
Vicente superó uno tras otro los martirios sin renegar de su fé. En la última de sus pruebas, después de pasar por el potro, y una cama de hierros ardientes, fue encerrado en un calabozo totalmente a oscuras que pronto quedó iluminado ante la aparición de un coro de ángeles que vertió pétalos de flores mientras entonaban cantos sublimes. Ante este milagro fue rescatado y curado con la idea de volver a someterlo al martirio pero pronto muere en el mes de enero del año 304.
De allí la fecha de la celebración que se ha establecido el día 22. El día comienza con la presentación teatral de los dolçainers seguida por una misa solemne en la Catedral y continúa con una procesión en la que se pasea la imagen del santo por todos los lugares en los cuales ocurrió su martirio. La calles se cubren de laurel al paso de la procesión y luego de ella se ha hecho una tradición bautizar, en la iglesia San Esteban a un niño valenciano, en homenaje a San Vicente Ferrer.
En la tarde siguen diversas actividades artísticas como un concierto coral en la parroquia que lleva el nombre del santo. Todas estas actividades son protagonizadas con habitantes ataviados a la exacta usanza de quienes protagonizaron el martirio del santo. Los visitantes vuelan a Valencia de todas partes del país para acompañar los rezos, plegarias, y procesiones o simplemente para disfrutar del espectáculo coral.

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